1.- Con 5 años me caí del balcón de una vecina que vivía en un primero. Resultado: una brecha en la frente con puntos de sutura y una pequeña cicatriz para el resto de mi vida. Mi padre me invitó después de salir del hospital a una Mirinda y me regaló un billete de cien pesetas. ¿Dónde está el drama?
2.- En 1º de EGB mi maestro don Blas (el primer maestro que tuve) me aprobó todas las asignaturas excepto las Matemáticas (me puso un 4 y fue el primer suspenso de mi vida). Gracias a ese suspenso, supe desde bien temprano que yo era de LETRAS y el camino que iba a seguir en mis preferencias en los estudios. ¿Dónde está el drama?
3.- En mi primer viaje de estudios como profesor se me perdió una alumna (que se quedó extraviada en la Capilla Sixtina). Tuve que entrar por 2ª vez al Vaticano sin hacer cola para buscarla y pude contemplar la Capilla un rato más con la alumna extasiada y extraviada. Nos emocionamos los dos. ¿Dónde está el drama?
4.- Perdí la virginidad en Mallorca (viaje de estudios del instituto), mientras en la habitación de al lado 40 alumnos -literalmente- se emborrachaban y cantaban a voz en grito “Ay, quién maneja mi barca” de Remedios Amaya. ¿Dónde está el drama?
5.- No hice la mili y, por tanto, para la época no me hice un verdadero hombre (hecho y derecho, como se decía antes). Soy, entonces, un medio hombre. ¿Dónde está el drama?
6.- Con 14 años fui con mis padres a un concierto de la Pantoja celebrado en el campo de fútbol de mi pueblo (Coín, Málaga). Me lo pasé pipa cantando a coro con mi madre “La bien pagá”. ¿Dónde está el drama?
7.- Mi padre persiguió toda su vida la ilusión de ver ganar un mundial a la selección española de fútbol. Cuando España lo ganó por fin, él tenía demencia senil y no se enteraba de nada, pero yo lo puse delante de la tele y le fui contando todo el partido y le dije que gritara GOOOOOOOOLLLLL cuando Iniesta marcó. ¿Dónde está el drama?
8.- Nunca me he casado, ni creo que lo haga. ¿Dónde está el drama?
9.- Aprobé sin plaza mi primera oposición sacando un 9´75 en la prueba oral gracias al tema 59 sobre Pérez Galdós. Ello supuso que, sin puntos por experiencia laboral, entrara en la bolsa de interinos que era a lo que yo aspiraba y trabajé desde el inicio del curso de 1998-99 consiguiendo uno de mis sueños, aunque no me dieran la plaza. ¿Dónde está el drama?
10.- Mi madre decidió morirse un día como este, el de mi cumpleaños, a la misma hora en la que nací (según figura en mi partida de nacimiento) pero cuarenta y tantos años después de parirme. Decidió marcharse agarrada de mi mano y yo leyéndole poemas de Walt Whitman. ¿Dónde está el drama?
11.- Gané vida, libertad, alegría, paz, ilusiones…cuando me enfrenté a las imposiciones de la sinrazón que me quisieron “robar” tiempo con mis hijos. El resultado es que vivimos los tres al 300% cada uno de los escasos minutos que pasamos juntos. ¿Dónde está el drama?
12.- Amé, quise, abracé, besé, olí, toqué…a los amores que tuve. Luego se fueron, como otras tantas cosas en la vida. Pero si amé, quise, abracé, besé, olí y toqué… ¿dónde está el drama?
13.- Frente a un cuadro de Klimt (“El beso”, concretamente) fui rechazado por una rubia de ojos verdes en aquella sala del Palacio Belvedere en Viena. Si me acompañaban Klimt y los amantes del cuadro, ¿dónde está el drama?
14.- Batí un récord: tuve el mismo chicle durante 23 días (excepto cuando comía y dormía, que me lo sacaba de la boca y lo escondía). Esto me produjo un castigo monumental de mi madre cuando lo descubrió pegado debajo de la mesita de noche. Pero si el chicle me lo traspasó de su boca a mi boca una chica espectacular, ¿dónde está el drama?
15.- Robé en el Pryca (hoy Carrefú) la novela de Millás “El desorden de tu nombre” con 18 años. Si ese libro supuso un antes y un después en mi vida lectora, ¿dónde está el drama?
16.- Con mi primera nómina de profesor le compré a mi madre un vestido para una boda y unos pendientes. A mi padre, unos zapatos y una corbata. Mi madre se enfadó alegando que no debía despilfarrar el dinero en ellos. Pero, ¿dónde está el drama?
17.- Llevo 8 años sin ver la tele (excepto cuando juegan partidos oficiales el Real Madrid, la selección española o Rafa Nadal). ¿Dónde está el drama?
18.- Tengo miedo (auténtico pánico) a los aviones. Pero los aviones me han llevado a Nueva York, Canadá, México, Egipto, Italia, Portugal, Inglaterra, Francia, Rusia y a las Islas Canarias. Entonces, ¿dónde está el drama?
19.- Me he ido quitando a unos cuantos pesados y pesadas de las redes bloqueándolos. Otros muchos me han bloqueado a mí. Si he ganado en libertad y tranquilidad, ¿dónde está el drama?
20.- Gané un concurso de poemas a los 21 años (esto es la primera vez que lo cuento –ya por fin, qué alivio-), premio dotado con 50.000 pesetas de las de 1991. No fui a recoger el premio (y, por tanto, no me lo concedieron) porque los poemas que mandé me di cuenta después de mandarlos al concurso que eran pésimos. Si fui coherente con mis criterios personales, ¿dónde está el drama?
21.- He hecho terapia durante unos cuantos años cuando verdaderamente lo necesitaba. Si el resultado fue darme cuenta de quién era, ¿dónde está el drama?
22.- La película que he visto más veces es “Átame!”, de Pedro Almodóvar. Me sé todos los diálogos y hasta los títulos de crédito del principio y del final de memoria. Soy un friki, lo sé; pero, ¿dónde está el drama?
23.- No hago deporte, me repele hacerlo, me salen sarpullidos de pensar en hacerlo, me pone nervioso que TODOS me digan lo necesario que es. Si estoy sano, no estoy gordo y mis movimientos corporales no se sienten limitados cuando hago el amor, ¿dónde está el drama?
24.- Compro más de 150 libros al año, todos los años. Un día alguien me soltó que no me quejara de no ahorrar nada. Yo le contesté que sí que ahorraba para libros que compraba y que dónde estaba el drama.
25.- En las bodas y en los entierros me dan ataques de risa. Más en las bodas que en los entierros. Si nadie me ve hacerlo porque yo me descojono por dentro, ¿dónde está el drama?
26.- Suspendí las matemáticas de 1º de BUP y las aprobé en COU (creo que me regalaron el aprobado porque el examen lo dejé prácticamente en blanco –estoy incapacitado para entender los números, lo juro-). ¿Dónde está el drama?
27.- Colecciono muchas cosas, pero sobre todo: plumas de escribir, marcadores de páginas, películas, libros y camisetas. No tengo apenas espacio en casa, pero si reinvento esos espacios cada dos por tres, ¿dónde está el drama?
28.- He vivido en 13 casas y ninguna me ha pertenecido o pertenece. Si no vivo esclavizado por una hipoteca, ¿dónde está el drama?
29.- Desde los 16 años apunto religiosamente los libros que leo, las pelis y las series que veo. Salgo a una media de 85 libros al año, 198 películas al año, 42 series al año. Algunas veces, por esto, me han acusado de ser un ser asocial, pero –sinceramente-, ¿dónde está el drama?
30.- He tenido dos cólicos nefríticos en mi vida, el segundo me llevó a un hospital y tuvieron que operarme de “piedras” en el riñón. Lo pasé fatal, creía que me moría de dolor, pero este me lo aliviaban con morfina que me transportaba a un paraíso de borrachera celestial que me dejaba grogui y en estado de trance hipnótico parecido a un orgasmo múltiple. Entonces, ¿dónde está el drama?
31.- Me he enamorado de verdad de la buena (sin contar los amores platónicos) seis veces. En sólo una de esas seis ocasiones he sido yo el que renunciaba. Si por cada renuncia la vida me regaló después la posibilidad de otros amores, ¿dónde está el drama?
32.- Tuve de preadolescente hipermetropía, ahora tengo miopía. Esas circunstancias no me impiden leer. Entonces, ¿dónde está el drama?
33.- Nací con tres kilos y pico de peso. Ahora peso 80 y me sobran cinco o seis. Pero, sinceramente, si he aprendido a caminar inconscientemente (ahora conscientemente) metiendo la barriga p´adentro, ¿dónde está el drama?
34.- Me estoy quedando calvo, pero calvo del copón de verdad. Pero si los selfies me los hago por delante y no se ve (de momento) esa calvicie, ¿dónde está el drama?
35.- Tengo dos hijos. Los mejores hijos del mundo le pese a quien le pese. Tengo pruebas fehacientes y aún más contundentes que lo pueden demostrar. Dicen algunos que los hijos restan libertad, te quitan tiempo para ti, te roban otra vida posible y te cambian los hábitos. Pero, qué coño y sinceramente, ¿quién ha dicho que yo quería otra vida y dónde está el drama?
36.- Mi sueño más recurrente siempre tiene como protagonista el agua en variadas circunstancias. En esos sueños aparecen cosas o personas (a veces yo mismo) que se ahogan. Si son sueños y no realidad, ¿dónde está el drama? (Ya, ya sé que los sueños nos avisan de cosas no resueltas, pero ya las resolveré, tengo tiempo: sólo tengo 50 años, ¿dónde está el drama?
37.- Sé, porque uno acaba enterándose (queriendo o sin querer), que me han juzgado, etiquetado, insultado; sé que se han dicho cosas muy fuertes sobre mí y sobre mi vida privada (rumores, habladurías, mentiras, invenciones absurdas, juicios y prejuicios…). Toda esa gente no se ha acercado a mí y no me ha preguntado para conocer mi versión. Sigo vivo y feliz y al lado –cerquita, muy cerquita- de mis hijos y de toda esa gente que me denigró. ¿Dónde está el drama?
38.- Descubrí que ser huérfano tiene sus ventajas. Aprendí que echar de menos es la prueba de amor más grande que me ha enseñado la vida. ¿Dónde está el drama?
39.- Mi padre se murió en la cama de un hospital, en silencio y de madrugada. Toda la noche de antes, lo estuve acompañando. Le hablé y le perdoné todos aquellos asuntos que tuve contra él y que aquella misma noche, viendo su desvalimiento y esperando su partida inevitable, comprendí que no eran más que meros juicios míos injustos y equivocados. Entonces, le pedí a él que me perdonara a mí. ¿Dónde está el drama?
40.- Con 42 años me vi en la calle, sin nada porque todo lo que había adquirido a medias no me lo devolvieron o no me dieron la oportunidad de compartir en lo que siempre pensé que hubiese sido un justo reparto. Nunca he pedido nada y entré en la casa que tengo ahora, que estaba vacía y he ido llenando poco a poco, paso a paso. En esta casa encontré mi vida verdadera, el rumbo y el camino que descubrí después que quería transitar. Aquí dieron sus primeros pasos mis hijos, aquí mi hijo aprendió a conducir en bici, aquí mi hija me dijo te quiero por primera vez. Si tenía que llegar “desnudo de casi todo” a esta casa para encontrar el recto obrar que merecía, ¿dónde está el drama?
41.- Tres personas muy importantes en mi vida en estos momentos las encontré (o me topé con ellas) en las redes sociales. Dicen que lo virtual no es verdadero y es una falacia de nuestro ego y un “vomitero” para nuestras frustraciones. Vale, pero yo sigo sin saber dónde está el drama de la virtualidad.
42.- Amo a quien me da la gana y encima me lo devuelven quintuplicado. ¿Dónde está el drama?
43.- Escribo y no publico. Si sé que un día decidiré dar el paso cuando me dé la gana, ¿dónde está el drama?
44.-Un día (con 24 años) soñé, literalmente, que daba una conferencia sobre “La Regenta” en un auditorio. Resulta que este 25 de marzo próximo voy a dar en Cartagena una conferencia sobre “La Regenta”. Si mis sueños se convierten en realidad, ¿dónde está el drama?
45.- “Echar de menos” es la expresión que más he utilizado, sin duda alguna, en los últimos ocho años. Si siempre la he expresado pensando en mis hijos, pero siempre llega otro martes cada semana, ¿dónde está el drama?
46.-Si no puedo leer todos los libros que me gustaría leer, pero sigo leyendo a diario todos los libros del mundo que puedo tener delante de mis ojos, ¿dónde está el drama?
47.-Me preparé toda mi vida y aún sigo preparándome para ser docente. Si, pese a todo, sigo creyendo en la mierda en la que se ha convertido la docencia, ¿dónde está el drama?
48.-Si te quiero y te quiero mucho, ¿dónde está el drama?
49.- Ahora mismo soy yo. El más yo de todos mis yoes. El yo que quiero ser ahora mismo. El más cercano a lo auténtico y el más retirado de las trampas que aún se pone este yo que soy. Si ser yo es la consecuencia más directa de ser yo, ¿dónde está el drama?
50.- Y tras todos estos dramas vitales, resulta que hoy cumplo 50 años. ¿Dónde está el drama?
Acabo de dejar a mi hija en el aeropuerto, se va a Roma este cuatrimestre, así que me he ido a la churrería del barrio, me he comido una porra y un café mientras te leía y con la carcajada aún puesta he pensado...que listo es este zagal.... ¿Dónde está el drama? Me guardo tu texto precioso, es una delicia