"BLITZ" (Reino Unido, 2024), de Steve McQueen
De esto va la película:
"The Blitz" fue una campaña de bombardeos sostenidos en el Reino Unido por parte de la Alemania nazi que se llevaron a cabo entre 1940 y 1941 durante la Segunda Guerra Mundial. Estos bombardeos de objetivos industriales y centros civiles comenzaron con intensos ataques a Londres el 7 de septiembre de 1940.
La obra que ha parido Steve McQueen es dos cosas: una belleza visual con momentazos maravillosos y un quiero y no puedo en resultados finales. Quizá sea la película más tradicional de su director (en esa línea de cine clásico que ya no se hace), también la más seca y fría (algo que acaba siendo muy frustrante) porque no logra nunca (pese a lo tremendo que narra) conectar con las emociones de los personajes y, por ello, el espectador tiene delante un espectáculo visual que lo deja helado frente a la pantalla.
Los personajes están poco desarrollados (por ejemplo el de la madre y ante el que la siempre estupendísima Saoirse Ronan poco puede hacer) y las situaciones se suceden remarcando clichés que se amontonan unos detrás de otros. Así, la peripecia épica de un niño de nueve años en mitad de tanto horror resulta una película con loables intenciones, pero sin alma. Y esto es su gran lastre que acaba matando a la película, que parece ahogarse en su apabullante empaquetado formal.
¿Merece la pena verla? Sí, sin duda alguna. Hay secuencias e imágenes dentro de ella que nunca se habían rodado con esa inmensa fuerza visual que siempre tiene el cine de Steve McQueen. La vi anoche con mis hijos y ellos estaban deslumbrados (lógico: sus retinas aún están vírgenes, no conocen la Historia de la humanidad todavía y, por edad, empatizaron con el niño protagonista) y así me lo dijo mi hijo: "Me ha encantado, es impactante". Me alegré mucho por ellos.
Yo le pongo un 6'5.
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