AÑO: 2021
PÁGINAS: 127
GÉNERO: relatos
En el primer relato, el narrador afirma: “A cierta edad, ya no está todo, ahí tendido, a tu disposición”. Además, esta frase aparece en la primera página al abrir el libro y ponerte a leer y parece (y seguramente lo es) toda una declaración de intenciones: este conjunto de relatos habla de la fragilidad del tiempo, de lo rápido que pasa todo y de la nostalgia, que para bien o para mal es una enfermedad de la que parece imposible librarse.
Hay dentro de los relatos una amalgama variada de personajes a la deriva y en constante vacilación o perplejidad. Todos ellos se nutren o respiran de la nostalgia: aunque vivimos en el aquí y ahora (cualquier psicólogo nos insistiría en poner conciencia en ello), ¿quién puede evitar pasar la mayor parte de nuestro tiempo surcando nuestra supervivencia entre los recuerdos? Por eso, los personajes de “FRÁGILES HUMANOS” (qué título más hermoso, por cierto, y más certero también) soportan sus zozobras, sus desconfianzas o sus perplejidades instalados en la huida de sí mismos para no asumir el presente. Y es aquí donde está la inteligencia de este libro magnífico: en obligar a posicionarse al lector, ya que los relatos no juzgan a los personajes y es quien lee el que debe hacerlo al juzgarse (o mirarse) a sí mismo mientras pasa las páginas y las historias lo van empapando de esa verdad que somos y pocos nos atrevemos a mirar.
El libro es todo un laberinto exaltado de emociones enquistadas que en un momento dado estallan y los personajes se refugian en la nostalgia, en la melancolía y en la añoranza de todo aquello que pudo ser y no fue. Pero, al mismo tiempo, muchos de ellos, al darse cuenta de esto, aceptan el presente, o se aceptan a sí mismos en el ahora, y los relatos producen una extraña (pero muy hermosa) comunión entre el reconocimiento y el auto perdón personal de los personajes por aquello que les falta, sin olvidar lo que han conseguido mientras ocurría la supervivencia.
Y detrás de todo esto, está ese escritor que es Ernesto Calabuig: un analista que filosofa sobre nosotros, sobre quiénes somos, sobre la fragilidad del resultado de nuestros comportamientos y sobre la perplejidad de vivir, que no es sino un inquebrantable y decidido caminar sobre todo aquello que se nos escapa.
Un libro para regalar a personas sensibles. Un libro para estrujarnos las emociones y mirarnos en los anhelos. No se lo pierdan, cuando lleguen a la última página y lean esto: “Hubo…otros muchos…como nosotros”, entenderán (con satisfacción) que ha sido un viaje que merecía la pena emprender.
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